Las diligencias de investigación abiertas por el Ayuntamiento por los incidentes en el acto por el derecho a decidir del 16 de septiembre en la Torreta concluyen la posible comisión de una falta disciplinaria relativa a la actuación policial. El informe municipal reconoce, sin embargo, que a continuación los agentes se replegaron para evitar problemas de orden público, garantizando así la continuidad del acto.
La Policía Local podría haber cometido una falta disciplinaria en su actuación con motivo del acto por el derecho a decidir que diferentes formaciones políticas convocaron el 16 de septiembre en la Torreta. Así se desprende del expediente informativo que el Consistorio abrió posteriormente para averiguar si se había vulnerado algún derecho civil en el incidente de un agente con dos periodistas.
El informe municipal menciona que el número de efectivos desplegados en la Torreta posiblemente fue desmedido. Para evitar que hubiera más problemas de orden público, a continuación los agentes se replegaron, por lo que la actuación policial no impidió la continuidad del acto.
La Policía Local se dirigió al lugar de los hechos en virtud de la Instrucción 1/2017 de la Fiscalía Superior de Cataluña, que obliga a los cuerpos policiales a actuar contra cualquier actividad convocada con motivo del referéndum del 1 de octubre. Casi en paralelo con la apertura del expediente informativo, el alcalde, Miquel Forns, dirigió una petición a la Fiscalía pidiendo que dejara sin efecto la mencionada instrucción.