La administración local cierra un local de ocio nocturno en la calle Ángel Vidal y un bloque de apartamentos turísticos en la zona de Ca l’Antoniet, aunque, en este caso, no se pudo ejecutar la medida por negativa del titular a la entrada en las viviendas.
El Ayuntamiento de Sitges ha revocado este martes la licencia de una discoteca en la calle Ángel Vidal lo que deriva en el correspondiente cierre. Asimismo ha ordenado el precinto un bloque de apartamentos turísticos en la calle Padre Albert Singla, en la zona de Ca l’Antoniet por el ejercicio de la actividad sin la correspondiente autorización. Según el Alcalde de Sitges, Miquel Forns, «el objetivo del Ayuntamiento es doble: garantizar el descanso de los vecinos y la convivencia en el espacio público, y garantizar los establecimientos y servicios con una oferta de calidad, y esto ocurre por el cumplimiento de la normativa «. Silos persigue un modelo tradicional de ocio que busca la conciliación de actividades de cualquier ámbito. «No queremos zonificar las actividades, lo que queremos es compaginar todas las necesidades, porque nos beneficia con la diversificación turística», asegura Hornos.
La discoteca ha sido precintada por las reiteradas ocasiones en que ha incumplido la normativa. El Ayuntamiento ya había reducido la actividad horaria de la sala de fiestas de las 6 a las 4 de la madrugada. El incumplimiento reiterativo del horario, lo que ha levantado acta en diferentes ocasiones la Policía Local, es la que ha provocado el cierre. Tras varias conversaciones del Ayuntamiento con los titulares de la licencia, así como con los operadores de la discoteca, «se ha revocado la licencia, a pesar del advertencias y el procedimiento administrativo», explicó Hornos. La afectación de la actividad a las personas, la salud de los vecinos ya la propia seguridad de la actividad no permitía que esta continuara.
Según explicó Miquel Forns, «la colaboración ciudadana ha sido básica». Este invierno, el Ayuntamiento estableció una mesa de trabajo con agentes del mundo empresarial y con vecinas y vecinos de la calle Ángel Vidal, que fueron muy activos, para consensuar decisiones que hagan compatible el descanso y la convivencia en la vía pública, con la actividad de ocio nocturno.
Precisamente, unas denuncias vecinales alertaron al Ayuntamiento de una posible actividad ilegal en un bloque entero de apartamentos turísticos en Ca l’Antoniet, donde se proveían de electricidad mediante generadores. La actividad, que se inició a principios del mes de julio, no tenía la cédula de habitabilidad, entre otros requisitos. Se ha procedido también al cierre cautelar de la piscina, porque no había superado las inspecciones correspondientes. La reacción de los servicios municipales ha sido, después de seguir todos los pasos necesarios, realizar una advertencia provisional que en el plazo de diez días pueda adaptarse a la normativa y, en caso contrario, se producirá el cierre. Para la concejala de Promoción Económica, Turismo y Playas, Aurora Carbonell, «queremos que las personas que vengan a Sitges y que utilicen este tipo de servicio privado tengan garantías de calidad, y que la oferta del municipio cumpla la normativa».
El Ayuntamiento dispone del departamento de Actividades y su equipo técnico para velar que las actividades que se realizan en el municipio se ajusten a la normativa. El incumplimiento de esta «genera competencia desleal a los empresarios del sector, y provoca afectaciones serias al conjunto de la ciudadanía, a los clientes ya la propia imagen de la ciudad como destino turístico de calidad», manifestó Aurora Carbonell.