Este viernes 16 de octubre, la Biblioteca Santiago Rusiñol abre puertas para mostrarse al público tras las obras de rehabilitación y supresión de las barreras arquitectónicas iniciadas en 2013.
La Biblioteca Santiago Rusiñol abre sus puertas al público, el viernes 16 de octubre, de las 10 a las 19 horas, en una jornada que servirá para mostrar el resultado de las obras de rehabilitación y supresión de las barreras arquitectónicas iniciadas en 2013. Para aquellas personas que quieran profundizar más en cuál ha sido el proceso de las obras y que han permitido redescubrir, el arquitecto municipal y jefe del gabinete de Alcaldía, Albert Bargués, ofrecerá visitas guiadas, a las 10h, 12h, 16h y 18h. La concejala de Cultura, Rosa Tubau, se mostró satisfecha por el resultado de unas obras «que permitirán mostrar la biblioteca en su máximo esplendor y recuperar un equipamiento de gran utilidad para la ciudadanía, con numerosas mejoras que la actualizan los nuevos tiempos y necesidades «.
Las actuaciones han servido para adaptar el equipamiento a los actuales criterios de accesibilidad y movilidad, con rampas de acceso, ascensor y nuevas dependencias sirve, aseos y almacenes. Se ha actualizado también la instalación eléctrica, el alumbrado y la climatización que se han dotado de nuevos equipamientos informáticos y de comunicación
Las obras han permitido ir más allá de la actualización del edificio y redescubrir los encantos y el aspecto de la que había sido casa del pintor, Miquel Utrillo, devolviéndola al aspecto que mostraba hace un siglo, por los alrededor del 1915. La recuperación de los colores originarios de las baldosas y de las paredes, acercarán al visitante a la sensibilidad y estética de los luminista, en un edificio moderno pero que mantiene el espíritu noucentista que lo vio nacer.
La Biblioteca Santiago Rusiñol inaugurará en la primavera de 2016 y ofrecerá, en un espacio abierto a todos y equipado con las últimas tecnologías en el ámbito de las bibliotecas, un fondo documental actualizado y vivo, sin olvidar su rico fondo local y patrimonial .
Las obras han sido financiadas por el Ayuntamiento de Sitges y la Diputación de Barcelona.