El motivo de la denuncia ha sido por las continuas faltas de respeto recibidas en las últimas semanas hacia la persona de Miquel Forns y por acusaciones falsas derivadas del ejercicio del cargo de la alcaldía de Sitges. Concretamente se acusaba al alcalde de haber hecho «un pelotazo urbanístico» en la nueva zona urbanística de Sitges e insinuaciones para subastas públicas de terrenos que en ningún caso se han producido y que son absolutamente falsas.
Además, el alcalde también ha denunciado la burla que ha recibido en las redes sociales por su orientación sexual. En este sentido ha dicho que «la diversidad sexual no es motivo en el siglo XXI para que nadie se burle de ninguna persona».
También se han hecho acusaciones a Miquel Forns de sueldos falsos y de posibles puertas giratorias en un futuro próximo, cuando acabe el mandato municipal, sobre trabajos que le darían a dedo en la Diputación de Barcelona, concretamente en el ámbito de las bibliotecas. El alcalde recuerda que «soy funcionario de la Diputación de Barcelona y bibliotecario desde el año 2001. Por lo tanto, tampoco podía aceptar estas acusaciones porque son falsas».
Miquel Forns destaca que «en democracia la libertad de expresión es un derecho fundamental, que se puede decir todo, se puede criticar la acción de gobierno, pero todo tiene un límite: los insultos y las calumnias. Y hoy lo que necesitaba era poner límites. Por lo tanto, celebro que las personas que habían hecho estas acusaciones y estos insultos y calumnias hayan llegado a un acuerdo de pedir disculpas públicas en el medio donde se produjeron, en Facebook. El respeto debe predominar siempre «.
El alcalde de Sitges subraya que «en ningún caso se había hecho una denuncia por decirme inútil e incapaz, sino por falsas acusaciones e injurias. Que es muy diferente. Podemos debatir y criticar todo lo que se quiera y fiscalizar la acción de gobierno -que es muy necesario en democracia- pero no se puede atravesar la línea de las falsedades y de las faltas de respeto «.
Desde la alcaldía y desde el gobierno se han recibido a menudo muchas críticas, pero «estas eran acusaciones muy graves que no sólo comprometían mi persona sino la institución», dijo Miquel Forns.
Desde el año 2011 el Gobierno Municipal apuesta por la participación ciudadana como eje fundamental y por este motivo se han creado diferentes espacios donde todo el mundo puede expresar su opinión, como las audiencias públicas, los consejos vecinales y las propias redes sociales de la corporación y de los cargos electos, donde todos pueden interactuar.